La historia de las cosas es parte de un proceso de evolución. Esos momentos responden al instante en que se dan en un contexto social, económico, político e intelectual tanto de un lugar en específico como mundial. Es en ese espectro que la música adquiere un papel protagónico en sí mismo en su capacidad de difundirse rápida y visceralmente por muchos lugares y ser interpretada en muchos espacios y hasta lenguas. El domingo 14 de julio de 2024, en el café teatro Punto Fijo del Centro de Bellas Artes de Santurce, el cantante e intérprete Pablo Alexis Santos llevó a cabo un concierto titulado “Boleros, historias y voz”.
El concierto fue uno en el cual el cantante y educador no solo cantó, sino que habló en cada canción de sus contextos históricos y de particularidades musicales. Estuvo compuesto por las canciones: “Contigo en la distancia” de César Portillo de la Luz (Cuba), “Tú me acostumbraste” de Frank Domínguez (Cuba), “Nuestro juramento” de Benito de Jesús (Puerto Rico), “Despedida” y “Bajo un palmar” de Pedro Flores (Puerto Rico), “El rincón que tú conoces”, “Se rompió la cadena” y el vals “Dulce amor mío” de El Súper Trío (Puerto Rico), la ranchera “Volver, volver” de Fernando Z. Maldonado (México), la ranchera “El Rey” de José Alfredo Jiménez (México),, “La gloria eres tú” de Juan Antonio Méndez (Cuba), “Bésame mucho” de Consuelo Velázquez (México), “Contigo aprendí” de Armando Manzanero (México), el bolero ranchero “Te lo pido por favor” de Juan Gabriel (México), la balada/bolero “Amnesia” de Chico Navarro (Argentina), el vals “Ódiame por piedad” de Rafael Otero López (Perú), la danza “Tú vives en mi pensamiento” de Eladio Torres (Puerto Rico), “¡Qué falta tú me haces!” y “Piel canela” de Bobby Capó (Puerto Rico), “El prendedor” de Tite Curet Alonso (Puerto Rico), “En mi Viejo San Juan” de Noel Estrada (Puerto Rico) y “Madrigal” de Felipe Rosario Goyco.
El concierto “Boleros, historias y voz” fue un viaje musical de exquisitas texturas auditivas. El espacio de ese café teatro fue preciso creando un especio de intimidad. Acompañado por el distinguido Trío Cielo y en la conga la joven percusionista Victoria Merced, dieron el toque melodioso preciso para que la potente voz de Pablo pudiera dar vida a esa diversidad de canciones.
Fue una velada única para la música. Las personas no solo disfrutaron de la parte musical, sino también de la histórica. Pablo cantó con el alma y el público lo premió dándole la suya. La palabra "gracias" fue la reina de la noche. La canción y las palabras fueron la excusa para celebrar el arte, la creatividad, el rico paso en el tiempo que se nos queda tatuado para siempre y nos lleva a seguir cantando a solas con nosotros mismos.
Para ver nuestras fotos del concierto pulse aquí
Comments